Este año, uno de los eventos más importantes organizado por nuestra casa de estudios trae consigo la oportunidad de conocer historias de la costa, sierra y la selva del Perú. Además de reunir diversas miradas culturales y fomentar el amor por el cine.
Por: Luciana La Torre
La novena edición de la Semana del Cine, evento organizado por la Universidad de Lima, se inauguró el pasado 11 de noviembre. Desde la proyección de películas nacionales como internacionales, hasta el concurso Corto de boleto Edición XIX, este festival cinematográfico reúne una gran cartelera de directores experimentados, como Jean-Luc Godard, y nuevas promesas del cine peruano, como Natalia Maysundo.
Este evento se ha convertido en un punto de encuentro para alumnos, expertos y cinéfilos en general, pero también ha servido para la coexistencia de miradas culturales e historias distintas. Por dicha razón, la Semana del Cine cuenta con una amplia variedad de proyectos audiovisuales que reflejan diversos puntos de vista del Perú y el mundo. Todo ello con el fin de fomentar la apreciación por el cine y promover un debate sano del mismo.
José Cabrejos, crítico de cine y director de la revista “Ventana Indiscreta”, menciona que esta festividad “está caracterizada por la novedad como tal (…) [Además] de las distintas posibilidades, enfoques o distintos cruces de cómo se puede contar una historia”.
Detrás de la cultura, hay historias que contar
En los últimos años, el cine regional está dando mucho de qué hablar debido al aumento de calidad del mismo, lo cual se ve reflejado en la cantidad de premios y galardones que ha recibido. Sin embargo, son también las historias tan únicas e importantes que han llamado la atención de muchos. Ina Mayushin, directora de cine pucallpina, comentó a Nexos que ver este tipo de experiencias plasmadas en en la pantalla grande nos da identidad y nos permite ver realidades diferentes.
Islandia, filme que se proyectará en esta novena edición y el cual ella misma dirige, cuenta las vivencias de una maestra que enseña en la Amazonía peruana. Mayushin explica que la inspiración para contar esta historia vino de sus padres, quienes fueron maestros durante varios años en Samito, cerca del río Nanay en Loreto, de cuya época surge el largometraje. “Es parte de mi identidad, al ser amazónica, lo que me sale del corazón es contar una historia cercana a mis orígenes” resalta Ina.
En otro orden de ideas, dentro del cine limeño han resaltado películas que apuestan por contar las vivencias de minorías antes marginadas. Por lo que en esta edición de la Semana del Cine también se proyectará “Arde Lima”, documental que sigue a la comunidad Drag de la capital.
Alberto Castro, su director, comenta que las películas normalmente se han virado hacia el travestismo, es decir, hombres heterosexuales representando personajes femeninos. Sin embargo, como él mismo menciona, “no hay una representación fidedigna de la comunidad Drag realmente, la cual significa diversidad, romper los esquemas de género, lo que la sociedad dice que implica ser hombre o mujer”.
En este sentido, el aspecto social fue un gran reto durante la producción de la película. El director de “Arde Lima” indica que un desafío muy grande fue grabar la película con drag queens, siendo Perú un país aún muy conservador. Incluso, Castro dice que “siempre teníamos seguridad por si acaso cualquier cosa sucediera”.
Uno de los grandes retos del cine peruano
A pesar de sus diferencias en visiones culturales, la mayoría de los proyectos cinematográficos en el Perú cuentan con un gran problema: la falta de presupuesto. Así pues, resultan cruciales los concursos como los del Ministerio de Cultura, que brindan apoyo económico a los largometrajes y cortometrajes bajo diversas categorías. Sobre lo mencionado, Ina Mayushin indica que “definitivamente lo que toma mayor tiempo es conseguir el financiamiento para hacer realidad las películas”.
En ello radica la importancia de festivales como la Semana del Cine, pues actúan como un punto de encuentro de decenas de historias y experiencias diferentes. Esto promueve la apreciación por todas las identidades peruanas, fomenta la representación de un Perú más allá de lo conocido. El director de “Arde Lima” menciona que “el cine peruano ha representado a un Perú muy limeño y muy urbano (…) en general necesitamos contar más historias, porque el Perú es vasto, pero no lo vemos reflejado en nuestros proyectos culturales”.
Así pues, este festival cinematográfico actúa como una “celebración de nuestra identidad o nuestras identidades (…) el cine muestra el talento de mucha gente del Perú y eso no podía pasar desapercibido en la Semana del Cine”, indica José Cabrejos. Por ello, no dejemos de apoyar al cine variado y diverso, y conozcamos más a fondo nuestra peruanidad y dejemos que otras visiones nos sorprendan.