A tres semanas de conmemorar los 200 años de Independencia del Perú, Víctor Rímac Trejo, montañista peruano, emprende un proyecto con el fin de llevar el símbolo blanquirrojo hacia el punto más alto del país.
Por: Diana Gómez
Se trata de una aventura patriótica y arriesgada. En medio de un año político y socialmente complicado, un grupo de montañistas peruanos decidieron conmemorar la fecha histórica del Bicentenario como mejor saben hacer: subiendo hasta la cima más alta del país e incrustando la bicolor en su punta. Fue el experimentado alpinista Víctor Rímac Trejo quien tuvo la iniciativa de realizar esta excursión, pero no lo haría solo. Junto a otros 25 miembros de la Asociación de Guías de Montaña del Perú alistaron sus preparativos y se enrumbaron en la escalada al Huascarán el pasado 7 de julio, llevando consigo una bandera de 200 metros de largo y 20 metros de ancho.
“Sin duda, uno de los mayores retos en esta expedición es la magnitud del símbolo patrio, ya que ronda los 400 m3”, comenta Rímac en una entrevista exclusiva para Nexos. El montañista nacido en Huaraz comenzó su carrera en el 2001, escalando montañas de la Cordillera Blanca. Él es uno de los cuatro peruanos que ha ascendido al Everest sin tanque de oxígeno, una hazaña realizada el 21 de mayo del 2017. Asimismo, desde el 2014 forma parte del ‘Proyecto Cumbres 8 mil’, en el que aspira a escalar las 14 montañas más altas del mundo. Hasta ahora ha logrado alcanzar la cumbre de las montañas que encabezan ese listado: Dhaulagiri, Manaslu y Cho Oyu, todas ubicadas en Nepal. Sin embargo, por la pandemia del COVID-19 el proyecto en mención se encuentra paralizado.
A pesar de haber obtenido la experiencia y condición física siendo guía de montaña, esta nueva travesía que ocupa un lugar especial en la trayectoria de Rímac ha requerido una preparación física y mental más exigente por parte de todo el equipo. “Desde hace un mes venimos entrenando para poder llegar hasta la cima”, asegura. Escalar montañas más pequeñas como el nevado Mateo, ubicado en Huaraz, y seguir un régimen alimenticio adecuado son algunos de los esfuerzos a los que se han sometido los miembros del proyecto ‘Bandera Bicentenario’.
Además del entrenamiento físico, otros preparativos igual de relevantes como la confección de la bandera vienen realizándose desde hace algunas semanas. “El alcalde de la municipalidad distrital de Huari nos ha apoyado en esto, y la bandera final se produjo en Lima”, afirma el líder del proyecto. Seis personas han sido las encargadas de realizar este trabajo en un taller ubicado en la avenida Hipólito Unanue, que se encuentra en la Victoria. La bicolor llevará incrustado el escudo nacional y el sello del Bicentenario, ya que este es un proyecto avalado por el Ministerio de Cultura.
“El 02 de julio se espera que la bandera esté terminada para ser trasladada a la región de Ancash; ya que el 07 del mes patrio empieza la travesía”, comentó el alpinista un día antes de iniciarla. La inauguración se llevó a cabo el 06 de julio en la Plaza de Armas de Carhuaz, y continuó con el equipo de montañistas profesionales movilizándose por las comunidades aledañas. Al día siguiente empezaron el ascenso a la cima del nevado.
La principal razón que impulsó a Víctor para enrumbarse en este proyecto inédito fue promover el turismo en la región, ya que este se ha visto profundamente afectado a raíz de la pandemia mundial. Además, el montañista señala que espera que este logro envíe un mensaje de integración, unión y hermandad, que cale en el corazón de todos los compatriotas que están viviendo una época de incertidumbre a nivel social y político. “Queremos hacer sentir al peruano bien orgulloso de su patria”, indica Ríos.
La escalada inició en el campamento base ubicado en Huaraz, donde el equipo de montañistas se repartió en grupos de cinco la bandera, pues debido al peso era necesario partirla en cuatro partes. Se cuenta con trineos que facilitarán la labor de ascenso, aunque el nivel de dificultad seguirá siendo elevado; por ello, los miembros de apoyo y el equipo técnico audiovisual encargado de transmitir en vivo solo llegarán al segundo campamento ubicado a 6000 metros de altura. Los próximos 700 metros hacia la cumbre solo serán recorridos por los 25 expertos.
“Se espera llegar a la cima del Huascarán el 10 de julio, y la bandera será colocada con estacas de aluminio hasta el día siguiente para que pueda ser apreciada en todo el Callejón de Huaylas, así como la extensión que comprende a la Cumbre Sur”, explica Rímac, también miembro de la Unión Internacional de Asociaciones de Guías de Montaña. Después de esta exposición se iniciará el descenso.
La expedición tomará siete días y finalizará el 14 de julio, día en que los 26 alpinistas vuelvan a pisar la ciudad de Huaraz. Sin duda, es una actividad que trascenderá en la historia del Perú, no solo por el carácter inédito que comprende el traslado del símbolo patrio más importante en un tamaño significativo hacia la cima más alta del país, sino también por el trasfondo de ésta: teñir al Perú de blanquirrojo en el Bicentenario y devolverle la esperanza de un mejor mañana.